El binomio Iglesia-electrónica ha cruzado ciertos límites que pocos habrían asegurado que cruzaría. Y no hablo ni de la captación de monjas por internet ni de los cepillos via electrónica. Ha llegado el Saint B, un reproductor posiblemente superior a los i-pods (todavía no está a la venta), pero eso realmente da igual, lo que impacta es su diseño. Y no es por su impecable cromado, ni por su filosofía de integrar carcasa y pantalla usando un display de OLED (remember: Interfaz del Nokia Aeon), ni siquiera por su tamaño (92x64x11 mm), ¡es que es un crucifijo!.
Para los i-podienses, no os escandalicéis, todavía hay salvación. El iBelieve es un accesorio para el Shuffle que te lo dejará así de mono, para fardar de católico con tus colegas.
Vía | Gizmología
Para los i-podienses, no os escandalicéis, todavía hay salvación. El iBelieve es un accesorio para el Shuffle que te lo dejará así de mono, para fardar de católico con tus colegas.
Con la Iglesia hemos topado.-Otra del Quijote. ¿Les cobrarán también a ellos el canon?.. hmm...
Vía | Gizmología
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